Albóndigas de Pollo a la Carbonara
PUBLICADO EL 01 - 10 - 2020 POR JAVI RECETASAlbóndigas de Pollo a la Carbonara. Dos añitos han pasado desde que publiqué mi última receta. Me parece increíble lo rápido que pasa el tiempo pero bueno …… después de este largo parón vuelvo a la carga con una nueva receta que será la primera de muchas otras que vendrán muy pronto 😉
Para el regreso he elegido una receta muy sencilla pero con mucho sabor, unas albóndigas de pollo que combinan genial con la salsa carbonara. A mis hijos y a sus amigos les encantan y podéis acompañarlas con patatas fritas, arroz blanco o incluso un poco de pasta que siempre gusta a los niños.
La receta como digo es muy fácil de preparar pero si queréis que las albóndigas os queden super tiernas os aconsejo encarecidamente que os saltéis la receta y leáis los consejos que doy al final.
Espero que os animéis a prepara la receta y aprovecho para daros a tod@s las gracias por la calurosa acogida que me habéis dado en mi Facebook y en mis otras redes sociales.
Un abrazo a tod@s y ya sabéis …. a la cocina!!!!
COMO HACER ALBÓNDIGAS DE POLLO A LA CARBONARA
INGREDIENTES para 4 personas:
- 400 ml de nata líquida (ver nota)
- 750 gramos de pollo picado
- 1 yema de huevo
- 40 gramos de miga de pan (ver nota)
- 4 cucharadas de leche (unos 40 ml)
- 1/2 cebolla pequeña (unos 80-100 gramos)
- 125 gramos de beicon a taquitos.
- 4 cucharadas de aceite de oliva (unos 40 ml)
- 1/4 de vaso de vino blanco
- 1/2 litro de aceite para freír
- Harina de trigo (para rebozar las albóndigas)
- sal fina
- pimienta negra molida
- Opcional: pan rallado
RECETA:
- En un plato hondo pon la miga de pan y la leche. Con una cuchara tritura la miga para que se empape toda en la leche.
- En un cuenco grande pon la carne picada de pollo, una yema de huevo, media cucharada pequeña de sal fina y unas vueltas de molinillo de pimienta negra. Añade la miga de pan remojada y mezcla todo muy bien durante un buen rato. Si la mezcla está demasiado pegajosa añade un poco de pan rallado (1 o 2 cucharadas) y vuelve a mezclar. Luego mete la mezcla en el frigorífico mientras preparamos la salsa carbonara.
- Pon una cazuela o sartén grande (que sirva para contener luego todas las albóndigas) un par de cucharadas de aceite de oliva y añade el beicon a tiras. Deja que se dore un poco y saca el beicon a un cuenco.
- Ahora añade a la cazuela un par de cucharadas más de aceite de oliva y la cebolla cortada en juliana (en tiras finas). Deja que se poche a fuego medio hasta que la cebolla se ponga muy blanda y empiece a tomar un color oscuro (como cuando hacemos cebolla caramelizada pero sin dejarla tanto tiempo al fuego).
- Cuando la cebolla esté lista sube el fuego y vuelve a añadir el beicon. Luego añade el vino blanco y deja que se evapore completamente. Por último echa la nata líquida y aparta del fuego.
- Pon en un plato o una fuente grande harina para rebozar las albóndigas. Saca la carne del frigorífico, ponte un poco de harina en las manos y coge un poco de la mezcla. Haz una albóndiga y pásala por la harina. Repite hasta tenerlas todas listas.
- Pon una sartén mediana a calentar con medio litro de aceite y cuando esté caliente (unos 170ºC) añade una cuantas albóndigas y fríe bien hasta que estén bien doradas (lee al final de la receta). Cuando estén listas sácalas y ponlas en un plato con papel absorbente. Repite con todas las albóndigas.
- Pon de nuevo al fuego la cazuela con la salsa y añade una pizca de sal y de pimienta negra molida. Añade las albóndigas y deja a fuego medio hasta que se reduzca la salsa y se ponga algo espesa.
- Cuando la salsa esté lista añade 2 cucharadas de queso parmesano rallado y mezcla bien. Prueba de sal y si hace falta añade una poca más. Y eso es todo, elige tu guarnición preferida y a comer!!!!
NOTAS:
- Puedes usar tanto nata para cocinar como nata para montar (que tiene más grasa). Yo usé esta última ya que así hay que reducir menos la salsa.
- Para la miga de pan usé dos rebanadas de pan de molde a las que le quité la corteza, pero también se puede usar el miajón de cualquier pan blanco.
- Se puede añadir a la mezcla de albóndigas un poco de perejil muy bien picado.
Lo más importante a la hora de preparar esta receta es impedir que las albóndigas nos queden secas. Para evitar esto hay dos momentos clave.
El primer momento clave lo tenemos a la hora de mezclar los ingredientes. El pollo picado no siempre viene igual y una veces estará más húmedo que otras. Por eso a la hora de preparar la mezcla tenemos que vigilar que nos que algo húmeda para que las albóndigas queden tiernas, pero no tanto como para que no nos deje formar las albóndigas. Lo normal es que siguiendo la receta la mezcla te quede bien, pero si la notas muy húmeda añade un poco de pan rallado y listo. Eso sí, no te pases añadiendo pan rallado porque si la masa queda muy seca es probable que las albóndigas no queden jugosas.
El otro momento clave es a la hora de freír las albóndigas. El tiempo de fritura variará dependiendo del tamaño de las albóndigas, si son pequeñas (menos de 35 gramos cada una) estarán en unos 3-4 minutos, si son más grandes necesitarán unos 5 minutos. Es importante no pasarse con la fritura para que no queden secas, pero tampoco podéis dejarlas crudas por dentro ya que en la salsa no estarán mucho tiempo y no tendrán mucho más cocinado.
OJO: comer carne de pollo poco cocinada es muy mala idea, mejor pasarnos un poco con la fritura que quedarnos cortos. Seguro que con la práctica le coges el punto perfecto.
También debes tener en cuenta que si añadís muchas albóndigas a la sartén se bajará de golpe la temperatura del aceite y las albóndigas tardarán mucho más en dorarse. Así que mejor hacerlas por tandas como en la receta.
Para el pollo picado va muy bien la carne de los contramuslos deshuesados y sin la piel. El problema es que en la carnicería no suele haber contramuslos deshuesados y el carnicero no se va a poner a deshuesarlos uno a uno para picártelos, a menos que tenga mucho tiempo libre. Yo por eso siempre le pido que pique unas pechugas de pollo que aunque son más magras (menos grasas) también quedan bien y te quitas de jaleo. Ahora bien, los que piquen el pollo en casa, si que pueden plantearse hacer la carne picada con los contramuslos.
Otra cosa. A la hora de pochar la cebolla y hacer el beicon no os paséis con el aceite ya que si al final queda demasiada grasa en la cazuela la salsa puede cortarse. No es que se ponga mala la salsa, se podrá seguir comiendo, pero estéticamente no quedará también ya que se verá aceite flotando y será menos apetecible.
Podéis preparar esta receta mucho más rápido si van preparando las albóndigas y friéndolas mientras preparas la salsa. Yo he decidido no hacerlo todo a la vez porque no me gusta estar con las manos llenas con la mezcla de las albóndigas y tener que estar vigilando la cebolla o la salsa, pero si uno se organiza bien y tiene un poco de maña se puede preparar la receta en un periquete 😉
Espero que os haya gustado esta primera receta de «el regreso» 🙂
Ya me contaréis. Un abrazo para tod@s!!!
Hola Javi:
Te he venido siguiendo desde hace ya unos años desde Japón, donde resido. Gracias a tu manera llana de explicar las recetas y a las fotos y a los vídeos que publicas, he conseguido cocinar platos deliciosos.
Me apenó mucho leer que dejabas de publicar recetas así que hoy me quedé gratamente sorprendida cuando vi que habías decidido volver con nuevos platos.
Gracias por compartir con nosotros tus conocimientos culinarios.
Has vuelto! No sabes cómo te lo agradezco.
El curso pasado me salvaste el menú de muchos días y como lo explicas todo tan bien, me suele salir buenísimo.
Gracias! 😉
OMG vaya pinta tiene esta receta, se me ha hecho la boca agua. Me la guardo para sorprender a mis amigos, muchas gracias.
¡Qué bien que estés de vuelta!
Como siempre lo explicas tan bien, da gusto leerte. Siempre que necesito una receta busco los ingredientes más «javi recetas», la de cosas que habré hecho gracias a ti… Un saludo y gracias
Gracias por la excelente forma de explicar tu receta y las notas tan importantes del final
¡¡Qué bien!!, sigo tus recetas desde hace años, justo hoy he hecho chocos con papas, como siempre con tu receta y me han quedado increíbles. ¡Gracias por volver!, un saludo.
Qué bien que has vuelto!! Eres mi Dios de la cocina!! Soy pésima en la cocina pero desde que descubrí tu blog ya no me da ni miedo ni pereza cocinar xq todo lo que hice tuyo me salió bien y es q lo explicas todo tan bien!!
En cuanto pueda me hago esta receta seguro que está riquísima.
Ni te imaginas la alegría que acabo de llevar cuando me enteré de tu vuelta!! No hay otro como tú explicando tus recetas! Siempre salen bien. Muchisimas gracias por volver y por favor ven para quedarte!!!!
@Esther gracias a ti por llevar mi cocina hasta un sitio tan lejanos. Y gracias también por la bienvenida. Un abrazo!!
@Maribel encantado de que las recetas te sean de ayuda!!
@Gustavo ya me contarás que tal salen esas albóndigas.
@Rita encantado de tenerte en mi cocina, así ¿Quién no regresa?
@Nelu gracias a ti por comentar!!
@Blanca me encanta saber que sigues el blog desde hace tanto y que te salen ricas las recetas 😉
@Eva qué puedo decirte? Qué un millón de gracias por tus palabras y un millón de abrazos!!
@Belén con comentarios como el tuyo de aquí ya no me muevo. Un abrazo fuerte!!
¡Qué bueno tenerte de vuelta! Tus recetas son mi primera opción cuando busco algo para cocinar, ¡siempre salen estupendas! ¡Un saludo desde Sevilla!