Vieiras a la Gallega. Esta receta es muy típica de Navidad pero como las vieiras congeladas las puedes encontrar todo el año las puedes preparar cuando quieras.

Estas Vieiras a la Gallega se preparan con un sofrito de jamón serrano y luego se gratinan en el horno y el resultado es sencillamente espectacular. Super ricas y con una pinta de cine para cualquier ocasión especial, navideña o no.

Al final de la receta te dejo algunos consejos para que te salgan perfectas a la primera y para que puedas prepararlas aunque no tengas las conchas.

¿Te animas con la receta? Pues ya sabes … a la cocina!!

Si compras las vieiras sin concha puedes preparar esta receta usando unas cazuelitas de cerámica apta para el horno. Eso sí, procurar usar unas cazuelitas pequeñitas para que el relleno llegue para cubrirlo todo. Además, como no tienes las conchas para presentar dos vieiras por cabeza puedes poner las dos vieiras en la misma cazuela y echar el doble de relleno. Así no debes tener ningún problema pero siempre puedes usar un poco más de cebolla y jamón para que te salga más relleno y listo.

Hay quién añade un poco de pimentón a las Vieiras a la Gallega. A mi me gusta bastante el punto que le da el pimentón pero no lo añade en esta receta ya que prefiero reservarlo para cuando hago las vieiras en salsa y así que no se parecen tanto las recetas. Si tu quieres añade una pizca antes de añadir el tomate frito y remueve fuera del fuego para que no se queme. Luego añades el tomate, mezclas bien y listo. De las dos maneras quedan riquísimas!!

Yo usé vieiras congeladas que vienen ya limpias aunque a veces traen algo de arenilla y por eso te aconsejo que las limpies muy bien. Nunca he usado vieiras frescas y leí, en esta página, que las vieiras frescas pueden contener una toxina y que deben ser evisceradas dejando solo la carne (músculo) y el coral (gónada) y que solo pueden ser comercializadas así, ya envasada en fresco en la época de extracción y congelada el resto del año.

Por cierto, hay vieiras congeladas que son muy pequeñas, si te pasa esto quizás quieras presentar tres vieiras por persona en lugar de dos. Otra opción es, si la carne de la vieira es demasiado pequeña, es echar dos o tres vieiras por concha. No te preocupes por el tamaño, aunque sean pequeñas seguro que también aportan muchísimo sabor a tu plato.

A mi no me gusta demasiado usar azúcar cuando cocino pero si los tomates son ácidos hay que rebajar la acidez para que las vieiras a la gallega queden perfectas. Quizás no sea lo más tradicional pero lo más importante es que el sofrito no quede ácido.

No te pases con el pan rallado. Si añades demasiado le costará empaparse con los jugos del sofrito y quedará seco sobre la vieira. Es mejor añadir una capa bien fina y dejar que se empape en el horno. Cuando se gratine quedará espectacular 😉

Una última cosa. No te preocupes si cuando lo metes en el horno se quema un pelín por los extremos. Esto pasa cuando se escapa un poco del sofrito y se hace mucho antes de que se gratine el resto pero no pasa nada. Simplemente evitas esas zonas cuando te las comas y listo.

Y eso es todo de momento, espero que te animes a preparar estas Vieiras a la Gallega en casa y que me cuentes que tal te quedaron. Un saludo cocina!!

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